Si hay alguien que todavía no conoce a Albert Collins, mejor tarde que nunca.
Nacido en 1932 en Texas, Estados Unidos, fue uno de los guitarristas y cantantes de blues más expresivos y eléctricos que alguna vez hayan pisado un escenario. Dueño de un poderoso y personal sonido con el instrumento, era además un gran cantante. Sin dudas el blues no fue el mismo luego de Collins, cuya guitarra más conocida es una Fender Telecaster del ´66. Su manera de tocar era tan particular que muchos comenzaron a llamarle "Ice Man", apodo con el cual se lo conoce y que deriva de lo "filoso" de su sonido, que conseguía con su Tele y cuerdas 0.10, las cuales castigaba con sus gigantescos dedos. Sin embargo, su personalidad nada tenía que ver con el hielo (ice en inglés). Era un gran showman y sus presentaciones eran famosas por sus caras y actitud en el escenario y fuera de él... Cuenta una de las tantas anécdotas que en uno de sus shows, bajó del escenario aún tocando la guitarra y se mezcló entre la gente. Esto no sorprendería a nadie, ya que es algo que siempre hacía. Lo curioso es que esta vez salió del edificio por unos momentos, y minutos después, mientras continuaba tocando en el escenario, un repartidor le trae la pizza que había ordenado mientras estuvo afuera!
Damas y caballeros, con ustedes: Albert "Ice Man" Collins.
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